Hoy una compañera y amiga de Madrid me envió, afortunadamente sin poder tomárselo en serio, el siguiente cartel, que al parecer anuncia una convocatoria específicamente anarquista para la jornada de las llamadas «Marchas de la dignidad» de este año. Por lo visto, dicho cartel ha estado circulando por redes sociales como Twitter o Facebook. Yo, que no tengo perfil en esos entornos, no me había enterado hasta hoy. Echémosle un vistazo:
La existencia de esta clase de convocatorias a priori puede parecer alentadora. No obstante, yo pregunto, siendo claro, lo siguiente: ¿A quién se le ocurrió la «genial» idea de difundir esto por redes sociales y de manera abierta? ¿Cuántas veces tendremos que decir que las redes sociales no son un medio válido de difusión para determinadas cosas?
Primer punto: ¿»Ven de negro»? El fetichismo del Black Block, la iconografía insurreccional y la imagen estereotipada del encapuchado vestido de negro han hecho mucho daño. No cabe duda. ¿Cuál es vuestro objetivo? ¿Que cualquier persona que vista de negro se vea rodeada de antidisturbios y estupas y sea registrada, identificada y controlada para impedirle llevar a cabo cualquier acción? Es que no entiendo el factor estrategia en este caso, sinceramente.
Segundo punto: Lo de difundir por redes sociales (después de todos los casos que ha habido de cuentas suspendidas o vigiladas, o incluso de procesos judiciales abiertos contra personas por hacer determinados comentarios o difundir determinados contenidos en sus perfiles) una convocatoria con una imagen de una acción del Bloque Negro en Alemania (el G-8 de Rostock en 2007, si no me equivoco) acompañado de una fecha, una hora y un lugar, ¿qué finalidad tiene? ¿Prevenir y avisar a la policía de dónde debe concentrar sus fuerzas, poniendo así en bandeja a la represión lxs compañerxs que acudan a la mani? ¿O alimentar una imagen puramente espectacular con la que crecerse, porque no somos capaces de llevar a cabo esa clase de estallidos en la calle? Nuevamente, no lo comprendo.
Conclusión: Lo único que se me ocurre es que o bien sea cosa de compañerxs con buena intención pero inexpertxs en la organización y preparación de esta clase de convocatorias (en cuyo caso, con la mejor de las intenciones, quisiera aconsejarles que revisen y actualicen su cultura de la seguridad), o bien que sea, directamente, algo que ha salido de los subterfugios policiales. Lo que espero de corazón es que los ámbitos realmente serios y dispuestos de Madrid no estén detrás de ésto, porque sería una decepción gigantesca.
Sea como sea, me parece obvio que esta convocatoria supone un grave riesgo para lxs que acudan, no sólo por los medios escogidos para la difusión, sino porque planificar algo así abiertamente y en un entorno como Internet cuyo funcionamiento escapa totalmente a nuestro control real y donde es imposible manejar o prever la circulación del citado cartel, expone a lxs compañerxs y les permite a los maderos prepararse para contener cualquier intento de desbordar sus cauces.
Que esta clase de convocatorias continúen apareciendo y fluyendo de esta manera tan irresponsable e insegura, en mi opinión, es sintomático de que todavía falta mucho por caminar en cuestiones de estrategia y seguridad, más allá del espectáculo y sus fetiches, que al fin y al cabo, no son otra cosa que un arma del enemigo.
Que se extienda la revuelta, sí, pero con sentido común y prudencia…