Tras los hechos vividos en la facultad de historia de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) donde un grupo de neonazis irrumpió al vestíbulo destrozando pancartas y otros materiales de colectivos antifascistas o libertarios y agrediendo a algunxs estudiantes y gritando que pensaban vengar a los dos miembros del partido Amanecer Dorado tiroteados en Grecia, ahora esta basura vuelve a protagonizar un nuevo episodio de violencia y provocación en el que queda, una vez más, muy clara esa simpatía con el movimiento neonazi que tanto se esfuerzan en negar u ocultar.
Según un comunicado de la Asociación Estudiantil Malayerba (la cual tiene una orientación claramente antifascista y antagonista), que añado a continuación, sobre 30 neonazis identificados como miembros de Liga Joven (chiringuito estudiantil del MSR) que aparecieron el pasado martes 17, pasadas las 19:00 de la tarde, en la facultad de biología de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) donde tras llenar el suelo con su propaganda comenzaron a romper carteles y material de la A. E. Malayerba que estaba colocado en las paredes, centrando su labor destructiva en los carteles en memoria del compa Pavlos Fyssas, rapero antifascista griego asesinado por Giorgos Roupakias, importante miembro del partido neonazi Amanecer Dorado, en un barrio de Atenas, y en memoria de Carlos Palomino, antifascista madrileño asesinado en el metro, a la altura de la estación de Legazpi, cuando se dirigía junto con más compañerxs a una contra-mani para protestar contra la realización impune de una manifestación abiertamente racista y xenófoba en un barrio lleno de personas migrantes (cabe decir que a pesar de la clara relación entre el asesino de Carlos y los grupos convocantes, una vez más la policía protegió aquella mani en la que, entre otras barrabasadas, se gritó «Menos locutorios, más crematorios», en alusión a los campos de exterminio nazis donde se cometió ese holocausto que lxs neonazis luego tanto se esfuerzan en mostrar como una de las mayores mentiras del S. XX… ¡pues algunos de vuestros coleguitas bastardos parecen dispuestos a repetirlo!). Además de ésto, al menos una persona, estudiante, habría sido agredida por estos gusanos cuando les recriminó su actitud (con perdón al gusano, criaturita invertebrada que no tiene la culpa de que estos seres – lo de humanos les queda grande – sean tan rastreros y cobardes).
De todas formas, del mismo modo que no tiene sentido llorar porque la poli y la delegación del gobierno legalicen y protejan actos de clara exaltación del odio racial, la homofobia y otras formas de dominación como el sexismo y las diferencias jerárquicas de clase, tampoco tiene sentido, desde mi punto de vista, recurrir al victimismo cada vez que el fascismo nos ataca. Estamos en guerra, y como tal, es lógico pensar que los golpes llegarán y que es necesario estar preparadxs para la defensa y, por qué no, para el ataque (y un buen ejemplo de cómo responder a este tipo de provocaciones es lo sucedido el 20 de noviembre en la facultad de derecho de la UCM, donde un grupo de antifascistas asaltó y destrozó el local de una asociación estudiantil franquista, hiriendo además a algunos de sus miembros que cometieron el grave error de asomar su hocico porcino por el lugar).
Por supuesto, en cuanto compañerxs se organizaron para salir a por lxs fascistas, estos «valientes soldados de la patria» salieron por patas, como hacen siempre que la proporción es superior al 30 contra 1 (a no ser que lleven encima sus preciados cuchillitos, que entonces lo que hacen es mandar a compañerxs al cementerio, como pasó con Carlos).
Desde aquí, toda mi solidaridad con la A. E. Malayerba y sus miembros y con lxs que dieron la cara para echar al fascismo una vez más de la facultad.
A continuación, sigue el comunicado de Malayerba.
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COMUNICADO A.E. MALAYERBA ANTE LA AGRESIÓN FASCISTA EN LA UAM
Hoy, 17 de diciembre, sobre las 7 de la tarde, un grupo de aproximadamente 30 nazis de Liga Joven con los rostros cubiertos por caretas han irrumpido en la Facultad de Biología de la UAM. Tras llenar el suelo con su asquerosa propaganda han procedido a quitar las pancartas realizadas desde nuestra asociación de estudiantes, en recordatorio a los asesinatos de Carlos Palomino y Pavlos Fyssas. En su paso por la facultad han agredido a un estudiante, aunque este se encuentra bien.
Debe quedar claro que el antifascismo y su difusión no son hechos que deban ser condenados: lo negativo y lo inadmisible son los valores que propugna una ideología sexista, clasista, homófoba y xenófoba. Luchar contra ellos no sólo es legítimo sino necesario.
Desde A.E. Malayerba queremos expresar nuestra gran repulsa ante este tipo de situaciones en las que el fascismo pasea a sus anchas por la universidad mientras el Rectorado sigue mirando hacia otro lado cuando le conviene; y la necesidad de actuar contra ellas, considerando además el gran auge que están teniendo estas ideologías de extrema derecha en la actualidad.
NINGUNA AGRESIÓN SIN RESPUESTA.
CONTRA EL FASCISMO NI UN PASO ATRÁS.
FUERA FASCISTAS DE LA UNIVERSIDAD.
¡NO PASARÁN!
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Es necesario aclarar, creo, que el trabajo de la A. E. Malayerba en ningún caso se limita a desmontar las tapaderas fascistas en la universidad y combatirles activamente, y que aunque mantengo algunas discrepancias con algunos de sus aspectos, en mi opinión es de reconocer su labor impulsando la crítica a la experimentación animal en una facultad donde ésta se realiza con frecuencia y dando recursos y consejos para la objeción de conciencia (es decir, negarse a hacer los experimentos por mucho que forme parte de los temarios especistas de turno). También destaca su labor en el fomento de la agroecología y la soberanía alimentaria, trabajo de género, su implicación en la crítica a los centros de internamiento y otros frentes que mantienen abiertos.
Conste que quien esto escribe ni vive ni estudia en Madrid, y que por lo tanto lo que sabe de esta asociación viene dado por convocatorias suyas que ha recibido y por lo que compañerxs de Madrid le han podido contar brevemente al respecto.
En la foto, una pancarta antifascista colocada en los exteriores de la facultad de biología de la UAM como una de las respuestas que, junto a concentraciones y la intensificación del trabajo diario, se ha dado a esta nueva agresión.
¡Nazis-téis sin cerebro!
