«Hay quienes piensan que luchamos por el mismo fin
remando en el mismo barco, ¡basta de fingir!»
– Extracto de la letra de la canción «Mentiras en red», de la banda de punk-rock Accidente.
Hoy un compa me pasó la siguiente fotografía, realizada recientemente en una calle del barrio madrileño de Vallecas, donde como podemos comprobar, algunos elementos marxistas-leninistas, de esos que se llenan la boca hablando de la unidad de acción y de lo malxs que somos lxs anarquistas que rehusamos someternos a las directrices de sus partidos y sus vanguardias dirigistas, decidieron estropear los carteles que anuncian una actividad organizada por compas de un nuevo Centro Social Okupado en la zona, llamado CSO La 13-14.
Una vez más comprobamos cuál es el concepto que muchxs marxistas-leninistas y stalinistas poseen de la «Unidad». Nada más ni nada menos que la sumisión y obediencia a sus vanguardias y a sus métodos, rebajando nuestro discurso para pasar a ser simple infantería a la que recurrir, u obstáculos que eliminar sistemáticamente en cuanto decidamos que no queremos que sigan controlando nuestras luchas, mientras califican de «lumpen», «pequeñoburgueses», «revisionistas», «agentes del sistema», «trotskistas» y otros calificativos despectivos y estúpidos que colocan a cualquiera que no acepte la autoridad de sus mandos, bajo un nuevo capitalismo de Estado que no tiene nada de revolucionario, tal y como se ha podido comprobar en las distintas experiencias que se han dado en la historia.
No sois más que aparatos gestores para una conflictividad que crece, recuperadores, apagafuegos, aspirantes a políticos profesionales con intereses propios que defender a toda costa, incluso boicoteando los auténticos procesos revolucionarios que ponen en peligro vuestras amadas posiciones dentro de las jerarquías de poder, excusándoos con las «condiciones inmaduras» y otros pretextos que ya no os valen.
Eso sí, luego en Grecia arden unas cuantas de vuestras sedes y lloráis hablando de anarcofascistas y parapoliciales. En fin, un consejo: Quitaos de enmedio, no vaya a ser que por aquí empiece a pasar lo mismo y vuestros chiringuitos comiencen a experimentar paranormales fenómenos de «combustión espontánea»…
Contra toda Autoridad. ¡Viva la anarquía!