El colectivo Askekintza, colectivo dedicado a la difusión y práctica de la lucha antiespecista en Donostia (Euskal Herria), ha sufrido una vez más la represión del Estado español contra cualquiera que plante cara a alguna de las múltiples formas de opresión y explotación que articulan su estructura. En este caso, varies compañeres han recibido cuantiosas multas (que en total suman 7200 €) por realizar una acción de desobediencia civil pacífica con el objetivo de evitar que se expusiese a Úrsula, una cerda, proclamando que ni los cerdos ni ningún otro animal son objetos o productos, sino individuos con intereses propios, que merecen respeto.
En el contexto de la fiesta de Santo Tomás (21 de diciembre) y con el pretexto de dar a la ciudad una ambientación de mercado medieval, sus explotadores pretendían que Úrsula fuese expuesta en una jaula como producto tras obligarla a engordar, con el estrés y maltrato que eso supondría para ella. Para intentar impedirlo, les miembros de Askekintza realizaron una sentada para intentar bloquear la jaula. Tras lograr retrasar seriamente la exposición del animal, fueron desalojades por las fuerzas policiales. Ahora, meses después, reciben la sanción correspondiente, que asciende a 7200 €.
Les compas solicitan ayuda para pagar la multa, y agradecen toda aportación. Para donar, se puede hacer por medio de la plataforma Paypal haciendo click aquí.
¡Nos tocan a une, nos tocan a todes!
Solidaridad con Askekintza y con todes les sancionades o perseguides por luchar contra el especismo y contra la explotación más allá de género, raza o especie.
