Aunque el texto tiene fecha de enero de 2018, y llega con unos meses de retraso, me ha parecido interesante traducir y difundir este escrito, que fue publicado en el blog A2day.net (yo he llegado al texto a través de su difusión reciente en 325). El texto repasa las acciones anárquicas de corte ofensivo o insurreccional que tuvieron lugar en Rusia, Ucrania y Bielorrusia en los últimos años, y la represión que llegó tras estos ataques, desde 2008 hasta el pasado año 2017. El texto va acompañado de un vídeo sobre la misma cuestión.
Decir que personalmente no comparto la idea de referirse a les anarquistas con una práctica más insurrecta como «anarquistas radicales» (a pesar de que por respeto al texto original he decidido traducir tal cual estaba en inglés) como si esas personas, por el hecho de haber tomado parte en ese tipo de acciones, tuviesen la exclusividad de la «radicalidad» anarquista. Por raro que le pueda sonar a quienes parecen profesar un cierto culto a la violencia y a la figura del encapuchado, yo creo que la radicalidad de un movimiento o de una práctica de lucha concreta, sea armada o no, sea incendiar un cajero automático, atacar a la policía o cultivar una huerta comunitaria, no se determina por la espectacularidad de las imágenes en los blogs y redes sociales o por la cantidad de cristaleras que se rompen mientras esa acción se lleva a cabo, sino por su capacidad real para subvertir las condiciones existentes y atacar a la dominación con un discurso que vaya directo a su raíz. El anarquismo, por definición, es un movimiento radical y no sólo porque muches compañeres hayan usado o usen la violencia para defenderse y atacar a sus opresores, sino porque su análisis es radical, y su práctica, (no siempre) consecuente con el mismo, también. Todo lo demás me parece hacerle el juego a la sociedad del espectáculo y sus categorías.
Aun así, aquí va el texto, que con todo me parece muy interesante.
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Anarquistas radicales en el BUR (2008-2017)
En Rusia les anarquistas radicales fueron derrotades ya a finales de los ’90 (caso NRA). El último luchador clandestino, Ilya Romanov, fue arrestado en 2002 en Ucrania y sentenciado a 10 años. ¿Pero han perdido les anarquistas su espíritu combativo? 10 años más tarde, una nueva generación de revolucionaries llegó, y querían más que manifestaciones y antifascismo.
El equipo de Anarchy Today ha preparado un pequeño vídeo de varios ataques realizados por anarquistas en Bielorrusia, Ucrania y Rusia (BUR) desde 2008 hasta 2017. Con ataques queremos decir destruir o dañar la propiedad del enemigo – edificios, oficinas, coches, equipamientos de construcción, objetos, etc.
Sucede que les anarquistas en el llamado BUR siempre han preferido los ataques incendiarios con molotovs. Como elles dicen, una guerrilla sólo necesita gasolina y una botella. Los artefactos explosivos caseros rara vez fueron usados.
Vale la pena señalar que hubo diez veces más ataques similares en ese período de lo que el vídeo muestra. Hubo cientos de ataques, de hecho, mayormente en Rusia. El hecho es que muchos de esos ataques no fueron filmados en absoluto. Algunes anarquistas nunca reivindicaron la responsabilidad o dieron una dirección falsa del sitio, incluso un país diferente. Por ejemplo, no hay vídeos de cómo anarquistas hacen explotan coches de policía, detonan bombas incendiarias en concesionarios de coches de lujo o plantan bombas caseras en edificios administrativos de la policía. Sólo podemos leer sobre ello en cortos reportes informativos en algunos sitios web anarquistas (Black Blocg, From Russia With Love, Kalarupa…) y en el libro другое поколение (Otra Generación). Hubo más ataques valientes y deslumbrantes de lo que imaginamos.
Como sabemos, en Moscú, el primer incendio antipolicial por la nueva generación de militantes anarquistas (es incorrecto llamarles insurreccionalistas) ocurrió durante la noche del 19 al 20 de febrero de 2009. Al día siguiente un vídeo fue publicado en la red por un grupo militante llamado La Venganza del Pueblo, que mostraba a personas lanzando molotovs al interior de coches de policía. La Venganza del Pueblo informó de que dos coches habían sido destruídos y llamó a «todas las personas decentes… a luchar contra las arbitrariedades y el despotismo de la policía, las agencias de inteligencia y la burocracia». Así, el período de los incendios y las explosiones empezó…
El primer ataque serio de les anarquistas de Minsk fue prender fuego a la puerta de entrada del Belarusbank el 1 de mayo de 2010. Antes de esto sólo había habido paneles publicitarios quemados y campañas simbólicas.
En Bielorrusia les anarquistas no lograron desarrollar su estrategia. Ya en el otoño de 2010, las autoridades lanzaron una represión a gran escala. Dos estructuras lidiaron con les anarquistas – Dirección General de Lucha contra el Crimen Organizado y la Corrupción (GUBOPiK) y el Comité de Seguridad del Estado (KGB). La policía no estaba bromeando. La mayoría de anarquistas radicales fueron arrestades. Algunes de elles se convirtieron en chivatos, otres permanecieron firmes, por esto fueron arrojades a las prisiones (ahora todes están ya libres). La propaganda del Estado incluso hizo una película sobre elles: Anarchy. Direct Action (2011.
En Rusia, la situación era mucho mejor. Esto se debe en gran parte al tamaño del país, y en particular, de la metrópoli de Moscú, donde se cometieron la mayoría de los ataques. También tened en cuenta: lo que para el régimen de Lukashenko es un ataque terrorista, para Putin es sólo hooliganismo. Después de todo, Moscú ha experimentado repetidas veces ataques terroristas realmente sangrientos organizados por militantes nacionalistas o fundamentalistas islámicos. Ningún ataque incendiario o explosivo anarquista puede ser comparado con eso.
Por lo tanto, las autoridades en Rusia no trataron con les anarquistas de forma apropiada. Hubo varias detenciones, pero ninguna específicamente por incendio, y nadie fue a la cárcel.
Y, después de 2012, la insurgencia ha disminuido. Por supuesto, los agentes del Servicio Federal de Seguridad (FSB) jugaron un papel importante aquí. Se las arreglaron para hacer que algunos de les anarquistas abandonen todos los intentos de destruír algo más. Algunes incluso tuvieron que abandonar el Estado policial ruso.
En el sitio Kalarupa (también conocido como el Centro de Estudios Anarquistas) podemos ver algunos reportes informativos del trabajo realizado por el underground anarquista en 2010, 2011, 2012, 2013.
En general, el underground anarquista no fue derrotado. Vive y se desarrolla.
¡Nuestra idea principal es que el pacífico movimiento anarquista abierto no tiene futuro! Sabemos una cosa: la lucha contra el Estado y el Capitalismo tiene que incluír una amplia gama de acciones, desde acciones pacíficas hasta acciones militantes*, desde acciones creativas a destructivas.
El período 2009-2012 fue el pico de la resistencia anarquista en la historia del BUR post-soviético. Casi cada día, especialmente en la región de Moscú, algo ocurría de día y de noche. Los medios empezaron a interesarse en el underground anarquista, y buscaron reuniones. En 2011, el periódico Ru publicó la primera entrevista con les rebeldes.
Los sitios web anarquistas cubrieron actividades similares desde entonces ya han sido cerrados o han muerto. Desde 2015, Black Blocg, el altavoz de la guerrilla anarquista, ha sido silenciado. Las acciones tienden a ser olvidadas, los reportes se pierden, los vídeos son retirados, este es un proceso natural. Nada es eterno. Pero nos gustaría seguir llamando a recordar y refrescar la memoria de aquellos años. Honramos verdaderamente esa tradición y todas las acciones militantes de los pasados años hechas por nuestres compañeres. Con este vídeo queremos introducir a les recién llegades a esta historia y agradar a les viejes combatientes que aun no se han retirado.
Buena suerte. Que los maderos no os cojan.
¡La resistencia anarquista militante continúa!
Enero 2018
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* Nota de Traducción de La Rebelión de las Palabras: Aquí, en el Estado español, por militancia entendemos la participación en un colectivo, organización o comunidad de lucha no necesariamente relacionada con la práctica insurreccional. Militancia se utiliza como sinónimo de «participación en…» o de «pertenencia a…». Sin embargo, en algunos países europeos, como Alemania o Rusia, es frecuente referirse a las acciones políticas con características ofensivas (sabotajes, enfrentamientos con la policía o con fascistas, disturbios, bloqueos…), ya sean realizadas por grupos o individualidades, como «acciones militantes».