Mapa es una publicación editada por compas portuguesxs y que aborda la realidad de forma crítica, desmontando su decorado para seguir generando puntos de ruptura con las nocividades del día a día que plagan el mapa terrestre y que hacen de la vida una red tóxica de dependencias e insuficiencias de las que el único que sale beneficiado es el sistema que nos explota y sus depositarios.
Yo conocí la publicación y tuve acceso a sus dos primeros números en la biblioteca anarquista A Ghavilla de Santiago de Compostela y la verdad es que fue un buen descubrimiento.
Salía hace poco el número 4, correspondiente a los meses de Diciembre 2013 y Enero 2014, y con el que la publicación cumple su primer año de cartografía rebelde. En esta entrega, entre otras materias, nos hablan sobre el ya infame fracking, nueva catástrofe que viene a confirmar aquello de que cuando piensas que la locura desarrollista ya ha alcanzado su máximo esplendor, para demostrarnos que estamos equivocadxs, siempre llega alguna nueva forma de ponernos a todxs en peligro mutilando literalmente el planeta, en este caso, perforando la tierra para extraer el gas almacenado en sus venas, con un riesgo enorme que va desde los terremotos hasta la contaminación del aire y los acuíferos (lo que por otro lado beneficia indirectamente a otras empresas que buscan hacer del agua un bien privado y que estarán encantadas de que las fuentes de agua natural, limpia y potable sean cada vez más escasas), entre otras consecuencias tan probables como desastrosas. También analizan el impacto del sector energético, reflexionan sobre el movimiento queer en Portugal y guardan un rincón solemne para el compañero Antonio Ferreira de Jesus, anarquista portugués fallecido recientemente tras una larga vida de lucha contra las prisiones desde fuera y desde dentro (la noticia en este blog aquí).
Para más información y para encontrar y leer varios artículos del periódico, recomiendo que visitéis la web del mismo (en portugués) aquí o que si tenéis la oportunidad pilléis la publicación.
