Esta convocatoria se publica en la noche anterior al día mismo de la concentración, pero dado que recibí hace unas horas el cartel pidiendo difusión urgente, procedo a ello, esperando que esto sea visto por alguien que no se haya enterado todavía y pueda acudir.
Mañana, miércoles 14 de mayo, a las 19:30 se convoca una concentración en la glorieta de Marqués de Vadillo (<M> Marqués de Vadillo) en el distrito de Carabanchel, para mostrar la solidaridad y cariño a Isma y Miguel, dos chavales que, si bien no son específicamente anarquistas (al menos no que yo sepa) se encuentran entalegados desde el pasado 22 de marzo por su presunta participación en los disturbios que se produjeron cuando la policía atacó sin razón la manifestación que se realizó aquel día en el centro de Madrid, con motivo de la confluencia en la capital de las llamadas «Marchas de la dignidad», llegadas desde diferentes partes del Estado y nutridas por personas de diversas ideologías y corrientes anticapitalistas (marxistas, anarquistas, colectivos de la izquierda independentista…) o por personas que sin estar necesariamente adscritas a ninguna tendencia concreta, querían protestar contra las políticas neoliberales del gobierno porque están hartas de que les tomen el pelo.
A Miguel le detienen el mismo día, poco después de los disturbios, acusándole de haber lanzado una piedra a un madero causándole supuestas lesiones cerebrales. En un primer momento, es acusado de intento de homicidio contra el policía, acusación que posteriormente cae por su propio peso, quedándose, si no me equivoco, en un atentado a la autoridad con lesiones, junto a otros cargos menores, y es enviado a prisión preventiva a espera del juicio. Cabe señalar que para sostener las acusaciones la policía alega que un agente de paisano le habría oído, supuestamente, presumir y fardar con otras personas de que acababa de tirarle una pedrada a un antidisturbios y que al día siguiente lo verian en la televisión (Miguel niega haber dicho tales cosas como también niega las acusaciones en su contra).
En cuanto a Isma, es detenido días después, en la caza de brujas que una vez más la brigada de información, tirando de archivo, desencadenó contra la militancia anticapitalista en Madrid, con el objetivo de vengarse por la humillacion sufrida el día 22 de marzo pero sobre todo de intimidar y dar un escarmiento, en un intento desesperado por dar muestras de fuerza para así prevenir un empoderamiento de los movimientos revolucionarios que pueda derivar en que el miedo cambie de bando y situaciones como la vivida aquel día se reproduzcan más a menudo. Siguiendo esta misma estrategia intimidatoria, Isma también es enviado a prisión preventiva.
A mí personalmente no me importa si son o no culpables. Ellos dicen que no lo son, y yo les creo. Si no lo son, merecen nuestra solidaridad y apoyo porque están comiéndose marrones muy serios por cosas que no han hecho, detenidos por estar donde todxs tendrían que estar, en las calles, luchando y dando la cara, y no pegadxs al televisor como estúpidos zombis sin voluntad, esperando que un milagro solucione sus patéticas vidas. Si por el contrario sí fuesen responsables de los cargos de los que se les acusa, también merecen mi solidaridad y, si cabe, con más hincapié, por tener la determinación y el valor para plantar cara a los psicópatas uniformados que el Estado envía a taparnos la boca y encerrarnos cada vez que desafiamos o cuestionamos sus estructuras.
Yo no me encuentro en Madrid, pero si alguien está en la ciudad, que no se quede en casa y acuda. Porque hoy son Miguel e Isma, pero mañana puede ser cualquiera de nosotrxs y lo sabemos. Isma y Miguel somos lxs que hemos sido detenidxs alguna vez, lxs que hemos visto a los maderos inventarse pruebas y cargos en nuestra contra y hemos tenido que tragarnos las palabras y llorar luego de rabia por su indigestión, lxs que alguna vez han dado la cara o lxs que todavía no la han dado pero empiezan a percatarse de que este mundo es una mierda y que el cambio comienza por dejar de respetar todo lo que nos oprime, actuando en consecuencia. Porque no son Miguel e Isma, porque somos todxs. Hoy un pedazo de cada unx de nosotrxs está en el talego con ellos…
Además, tampoco podemos olvidarnos de todas las personas que, aunque esperan su juicio en la calle, fueron detenidxs a su vez aquel día y esperan juicios donde también se arriesgan a graves sentencias.
¡Solidaridad hasta la absolución con Miguel e Isma, y con todxs lxs detenidxs!
Quien siembra miseria recoge rabia. Estamos en guerra…