Según una noticia publicada en el blog de lxs compas de Verba Volant, 2 neonazis atacaron a un inmigrante en el barrio de Metaxourguio (Atenas).
El incidente habría ocurrido en la madrugada del 17 de junio, cuando 2 neonazis se bajaron de un coche para golpear a su objetivo que se encontraba en la calle, a escasos metros, por cierto, del cuartel de la policía de tráfico de Atenas (cuyos bastardos agentes, como de costumbre, permanecieron pasivos y no hicieron nada para impedir la agresión). Una vez que la víctima del ataque fascista cayó sangrando al suelo, los neonazis continuaron golpeándole, llegando incluso, según testigos presenciales (que sí intervinieron, a diferencia de los maderos, siendo amenazados e increpados a su vez por los nazis que les dijeron que les tenían fichados y que se iban a «enterar de lo que significa Amanecer Dorado»), a saltar varias veces encima de su cabeza. Lxs testigos habrían podido apuntar la matrícula del vehículo del que se bajaron los dos nazis, y por si acaso alguien se encuentra el coche una noche cualquiera y decida enviarle un mensajito a sus propietarios, el número es: YNK 3249 (el modelo es Suzuki Swift).
Señalar que la persona atacada por los nazis sobrevivió a la paliza, fue trasladada al hospital más próximo e ingresada, y hasta ahora no se tienen noticias ni de su fallecimiento ni de si su situación ha empeorado. No obstante, este tipo de ataques no son hechos aislados, sino que forman parte de una estudiada metodología de terrorismo fascista amparada por los cuerpos represivos del Estado griego (no olvidemos que este año, el porcentaje de maderos que mostraron su apoyo al partido neonazi Amanecer Dorado en las elecciones europeas también fue escalofriante – ver noticia aquí, en Verba Volant, para más información). Frente al canibalismo social de los fascistas, los medios de comunicación, los políticos y los grandes empresarios, la única baza es la auto-organización y la respuesta contundente y autónoma.
El fascismo no se somete a debate, se hace desaparecer, por las malas y sin concesiones.
¡No hay diálogo posible con lxs enemigxs de la libertad!