Recibo en el correo electrónico y difundo (perdón por la pequeña tardanza, compas) el siguiente comunicado reivindicando el incendio de varios vehículos en Viña del Mar y Santiago de Chile.
Antes de dar paso al comunicado, quiero aclarar mi postura al respecto, pues he oído/leído críticas al mismo (o mejor dicho, a la acción cuya responsabilidad reclama) que no me parecen honestas o que, al menos, creo que no están bien dirigidas.
Algunas personas han dicho que esta es una acción mal enfocada que perjudica a «personas proletarias«, afirmando que zonas como San Miguel no son barrios burgueses sino áreas populares y precarias. Yo personalmente no vivo ni he estado en Chile, y no sé cómo es ese área, ni qué clase de vehículos o de personas hay allí, pero como dice el propio comunicado, a las personas que llevaron a cabo estos ataques no les importa el precio de los vehículos porque con su destrucción buscan atacar a la propia imagen de una sociedad dominada por la tecnología y todo lo que ésto implica en cuanto a impacto medioambiental y destrucción de ecosistemas enteros, vidas humanas y no-humanas, artificialización progresiva de relaciones, sensaciones y estímulos, control social y otras nocividades derivadas de un mundo que avanza al abismo a cada vez más velocidad, enloquecido por las necesidades de movilidad y desplazamiento de lxs esclavxs en la era de la emergencia permanente.
Toda acción ha de ser sometida a crítica, y yo mismo guardo varios desacuerdos con este ataque (aunque no creo que Internet sea el espacio para debatir ese tipo de cuestiones), pero no me parece constructivo ni positivo el tratar de tergiversar (conscientemente o sin querer) el contenido de una acción de sabotaje, o restarle importancia apelando a mitologías del pasado como por ejemplo el llamado «proletariado», el cual hoy en día ha desaparecido reemplazado por personas ensimismadas que han olvidado todo lazo comunitario y de clase (lo que no significa que haya que renunciar a recuperar esos vínculos en las distintas esferas de nuestra vida, subvirtiendo las relaciones podridas que los anulan).
También he oído críticas relativas a la contradicción entre hacer un sabotaje para atacar a la sociedad tecnológica y difundir el comunicado usando medios tecnológicos. Bueno, algunxs «puristas» (tan impurxs como lxs demás) tal vez preferirían que este tipo de actos se reivindicasen mediante inscripciones en losas de granito utilizando puntas de obsidiana y sílex como nuestros antepasados salvajes, pero dadas las circunstancias de nuestro tiempo, aprovechar ciertos medios al mismo tiempo que se extiende la crítica es, hasta cierto punto, inevitable. Yo utilizo tecnología, al igual que las personas que hicieron esta acción contra ella y sin embargo escogieron Internet para divulgar su reivindicación, y esto no invalida ni vuelve falsa dichas críticas. Las falacias ad-hominen que esgrimís sólo evidencian vuestra falta de capacidad dialéctica y argumentativa.
Si alguien ha alcanzado la coherencia plena, que levante la mano; mientras nadie la levante, este tipo de críticas destructivas no ayudan a nada que no sea a paralizar los actos que, aunque a la desesperada y con errores, intentan al menos romper los espejismos de la armonía capitalista y la paz social que mantiene a flote este detestable mundo. Por supuesto que existe una contradicción, como en todxs lxs compas que aun utilizan dinero, o que no viven okupando, o que siguen yendo a currar, o que viajan utilizando coches, aviones o trenes porque a pie o en bicicleta no llegarían a tiempo a sus destinos y aunque sea haciendo auto-stop o colándose terminan dependiendo de esas máquinas que desprecian, o sin ir más lejos, en cada persona que apoya y comparte la perspectiva insurreccional pero se encuentra paralizada por el miedo a muchos niveles y no hace todo cuanto desea (y puestxs a admitir fallos, aquí entraríamos personas como yo y como muchxs compas más que poco a poco enfrentamos nuestras propias inseguridades y nuestros miedos pero todavía no vemos el momento de dar el paso y quemar los puentes que permiten una vuelta a la normalidad). Esas contradicciones habrán de ser discutidas en cada grupo de afines o en cada colectivo y en un plano individual también, y cada unx las superará como estime conveniente o necesario, pues ni todas tenemos el mismo ritmo ni todas estamos preparadas para las mismas situaciones, pero si en lugar de en un vehículo para el debate se convierten en un arma arrojadiza para atacar a quienes atacan y deslegitimar sus actos mientras que quien critica y ensucia no aporta nada ni tampoco ataca, entonces para mí no son más que mierda teórica, y es mejor que cada unx se la guarde para sus propias masturbaciones mentales.
Dicho ésto y aclaradas algunas cosas que consideraba importante definir, doy paso al susodicho comunicado. La acción, por cierto, se dedica a varixs compañerxs presxs (como los del Caso Security, Tamara Sol, Ted Kaczynski – más conocido por el pseudónimo que la prensa burguesa le puso, Unabomber -, Nikos Maziotis o «Cariñoso» y Mónica) y a la memoria de compañerxs muertxs o asesinadxs en acción (Mauricio Morales, Sebastian Oversluij, Alexis Grigoropoulos…).
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Previamente organizados y con el blanco claro, en la madrugada del dia 23 de julio de 2014 atacamos rociando y prendiendo con acelerante 5 vehículos motorizados. En Ñuñoa en la calle Los jardines, aproximadamente a las 12:45, una lujosa camioneta Volkswagen, en San Miguel en la calle Quinta avenida y en la calle Eduardo Ruíz Valedor aproximadamente a las 12:57, 2 ostentosas camionetas y un vehículo deportivo , y en Viña del Mar en la calle Dos poniente aproximadamente a las 01:15 otra bastarda camioneta de alto precio; dejando panfletos alusivos a compañerxs presxs y muertxs en cada uno de los hechos .
Honestamente nos importa un bledo el rango de precio de los vehiculos incinerados, ya que lo que buscamos con esta acción es dar un pequeño golpe a la sociedad tecnócrata capitalista y no sólo al ligero concepto “rico o burgués”. Sociedad que con su estructura civilizada destruye nuestra existencia como individuxs, negando nuestra capacidad de sentir, de conocer, de descubrir, de amar y de oponernos a lo que no nos parece. En los vehiculos motorizados vemos visualizado ampliamente el patrón domesticador de este sistema atosigante, en la permanente contaminación, en la constante de depredación de nuestro planeta, en las fabricas de vehiculos destructoras y explotadoras, de las cuales lxs dueñxs son lxs grandes magnates y controladorxs de este mundo tan desquiciado, esparciendo la visual humana-domesticada que dicta que el/la individux por sí solx no puede sobrevivir, creando realidades ficiticias, que nos hacen creer desde que nacemos que por el sólo hecho de ser humanxs vamos de la mano a aparatos tecnológicos que casi son parte de nuestro cuerpo cual mutacion, que somos superiores a otras clases sociales, que tenemos pleno derecho en la vida del resto de lxs animales y del ecosistema, vemos estas apreciaciónes en la actitud que toman lxs niñxs ciudadanxs todo el día con sus celulares malditos, con sus consolas de juego, matando sus neuronas, aniquilando su creatividad, su imaginación, atrofiando sus cuerpos comiendo comida chatarra, comida de supermercado, comida envasada, vemos en las máquinas el enemigo, tal cual como unxs bastardxs policías, vemos la sociedad imperante como el apogeo de las catástrofes de los errores de la ineptitud humana a lo largo de los siglos, aniquilando sin mirar corazones ni escuchar llantos, como también a lxs animales no-humanxs que nos rodean, esclavizándolxs y utilizándolxs como si fuesen objetos inertes, sin sentir, sin sufrir, sin sistema nervioso central… obviamente estamos por la destrucción todos los días del capitalismo, pero detrás del capitalismo o de la mano quizás, vemos innegablemente a la sociedad y a la civilización que tanto daño han hecho, y si nos quieren acusar de terroristas en los medios de comunicación del poder y en el estrato ciudadano pasivo pues que lo hagan, porque si tomar las riendas de nuestras vidas y reaccionar como animales que somos de manera salvaje a lo que nos ha destruido, apagado, y aniquilado desde hace muchos años es terrorismo, pues lo somos… si negarnos a la legalidad y a la vida ciudadana triste y previamente rendida es terrorismo pues lo somos… pero nosotrxs sabemos y ustedes compañerxs saben que sólo buscamos desesperadamente un mundo que no esté cubierto por tantas atrocidades, por tanta muestras de insensibilidad, por el deseo de poder, por el deseo de poner el pie encima de otrx sea humanx o no, sabemos que la búsqueda valiente y convencida de una nueva realidad que no esté podrida en malos deseos, ambición y autoridad como la de las ciudades capitalistas domesticadoras es una validera y larga batalla sin tregua.
Contra toda autoridad, contra la sociedad, contra la civilización y las máquinas, fraternidad internacionalista, abajo las fronteras y todos los Estados del universo.
Hans Niemeyer, Ted Kaczynski, Mónica Caballero, Nikos Maziotis, Francisco Solar, Marcelo Villarroel, Juan Aliste, Freddy Fuentevilla libres en cada acción insurreccional salvaje.
Mauricio Morales, Alexandros Grigoropoulos, Sebastian Oversluij con pena, rabia y coraje vengamos con nuestra cotidianidad su valiente muerte en combate .
Atte:
Enjambre vandálico de niñxs vichxs
