Recibimos y difundimos este pequeño resumen del taller realizado por algunes solidaries en el centro social Cova dos Ratos (Vigo) el pasado viernes 13 de septiembre, en el marco de la solidaridad con la huelga de hambre rotativa en curso en las cárceles españolas.
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El viernes un grupo de solidarias, pequeño pero con ganas y animado, llevamos a cabo un taller de carteo a personas presas en lucha en las cárceles españolas. La idea era romper el aislamiento que imponen los muros, y animar a la gente a superar esa barrera de dudas que se presenta siempre cuando te planteas escribir por primera vez a alguien que está al otro lado, además de por supuesto enviar palabras de afecto, solidaridad, complicidad o simplemente, un poco de color y calor humano a las que están poniendo sus cuerpos como última barricada para resistir contra los abusos sistemáticos de Instituciones Penitenciarias y de toda esta sociedad-cárcel contra ellas, por ser pobres, o simplemente, por no poder o no querer adaptarse a las normas de un sistema asesino, cruel e injusto. También aprovechamos para dar voz a otros casos no relacionados directamente con la huelga de hambre rotativa, pero que también están sufriendo en sus carnes las arbitrariedades y el sadismo de los organismos represivos, como por ejemplo las chavalas de Altsasu, que esta semana deberían empezar a recibir respuesta del Tribunal Supremo sobre la ratificación o revisión de sus condenas, el compañero Rodrigo Lanza, que en noviembre tendrá su juicio por defenderse de la agresión racista y fascista de un neonazi, la compañera Lisa o las presas independentistas galegas, entre otras.
Como ya se dijo por ahí, escribir a las personas presas no nos cuesta nada, y solo nos quitará un poco de nuestro tiempo, mientras que para ellas recibir una carta puede ser lo mejor que les pase en semanas o meses, y puede marcar la diferencia entre mantener la moral alta o hundirse. Por eso, aunque muchas no pudiesen o no quisiesen venir, seguimos animando a todo el mundo sensibilizado de algún modo con la problemática carcelaria a sentarse delante de un papel con un boli y expresar y enviar su solidaridad, tomando precauciones (por Internet podéis hallar listas de consejos para escribir a las personas privadas de libertad) pero sin dejar que se siga imponiendo la comodidad del silencio cómplice sobre la que el Estado español edifica los muros de su democracia, mantenida salvajemente sobre prisiones que embrutecen, deshumanizan, torturan y asesinan los cuerpos y los sueños de tantas excluídas y rebeldes.
Un abrazo muy, muy fuerte a Jose Ángel Martins Mendoza «Peque» en huelga de hambre rotativa desde el 10 hasta el 20 de septiembre, y a todas las que día a día, de un modo u otro, plantan cara como pueden a la hidra penitenciaria. No estáis solas.
Una de las personas solidarias participantes del taller
