El 27 de noviembre, un comunicado reivindicaba un sabotaje contra una torre de radio de la empresa Vodafone en Berlín, como acción de solidaridad con Chelsea Manning y contra la xenófoba política migratoria del Estado alemán. También se reivindicó como una acción contra el cada vez mayor control de la vida por la tecnología y sus entornos, virtualizando las relaciones, suprimiendo el contacto humano, mientras en nuestras ciudades todo está mediado por el consumo compulsivo y los aparatos electrónicos, la artificialidad y la dependencia de estructuras asesinas y ecocidas.
Sé que es muy fácil decir esto desde un blog en Internet, tecleando desde uno de esos engendros tecnológicos cuyo funcionamiento interviene en la aniquilación de la vida salvaje en este planeta patentado y de las comunidades y relaciones humanas, pero a pesar de la contradicción, que no disculpo y sólo puedo reconocer y aceptar como un mal menor que tiene como punto positivo la reapropiación de espacios de internet para una información antagónica, considero importante reflexionar sobre estas cuestiones y sacar conclusiones que se materialicen en actos consecuentes.
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El 27 de noviembre, por la noche, atacamos la red electrónica de comunicaciones de Berlín. Nuestro acto de sabotaje tuvo lugar en una torre de radio de Vodafone e intenta ser un símbolo en contra de la vigilancia total de los gobiernos, servicios secretos y corporaciones transnacionales.
Se eligió Vodafone debido a su elevada participación en la cooperación con los servicios secretos británicos, GCHG (Government Communications Headquarters), que coopera con los servicios secretos de Estados Unidos, la NSA (National Securtiy Agency), y a su vez esta coopera con los servicios secretos alemanes, BND (Bundesnachrichtendienst). Los servicios secretos recolectan patrones de normalidad y comparan comportamientos particulares para descubrir si planearías algo anormal, antes de que tú mismx lo sepas. Las colaboraciones de la industria de los servicios secretos y los servicios secretos de la industria aseguran las condiciones de las ganancias y poder para ambos.
Para nosotrxs, el uso sin cuidado de aparatos eléctricos y de aplicaciones de internet es un problema: se puede digitalizar cualquier movimiento y la tecnología no es neutral. No sabemos cómo es un desarrollo emancipatorio de la comunicación, pero creemos que funcionaría de manera diferente y tenemos que encontrarla juntxs. Mientras tanto, animamos a bloquear la infraestructura y paralizarla. Contra el flujo de explotación y vigilancia, contra una sociedad basada en la destrucción de lo humano y la naturaleza.
¡Sabotaje a la industria de la vigilancia y las infraestructuras de la explotación! ¡Ciega a los servicios secretos!
Libertad de movimiento y asilo para Edward Snowden y para todxs. ¡Ni fronteras ni naciones!
¡Libertad para Chelsea Manning!
¡Que exploten muchos volcanes!
