El pasado 29 de marzo tuvo lugar en diferentes puntos de la región chilena el llamado Día del Joven Combatiente, jornada de revuelta que recuerda anualmente a Rafael y Eduardo Vergara Toledo, dos guerrilleros urbanos asesinados por los Carabineros durante la dictadura de Pinochet, cuyos herederos continúan gobernando y reprimiendo, torturando y matando, con el beneplácito social que garantizan las mentiras de los medios de comunicación a su servicio.
Como todos los años, diferentes expresiones de lucha florecieron sobre el asfalto, siendo las más candentes e importantes las que tuvieron lugar en las llamadas «Poblaciones», zonas suburbiales en las periferias de las grandes ciudades donde la pobreza y la marginación dominan la vida de muchas personas. Fue en uno de estos lugares, la población de La Victoria, donde cuatro compas fueron detenidxs y brutalmente golpeadxs por maderos del cuerpo de Carabineros, con lesiones diversas (rotura de piezas dentales y heridas profundas en la cabeza, por ejemplo). Lxs compas, llamadxs Chrystal, Javier, Miguel y Paz, se encuentran ahora mismo encarceladxs (Chrystal y Paz en el talego de San Miguel y Miguel y Javier en el de Santiago I), con cargos por los supuestos siguientes: intento de quema de un autobús del Transantiago con peligrosidad para las personas, homicidio frustrado a un madero de Carabineros, porte de artefacto incendiario (cócteles molotov), allanamiento de morada (por haberse colado, presuntamente, en una vivienda privada para ocultarse de los maderos que les perseguían) y transgresión de la ley antiterrorista. De este modo, lxs compas se arriesgan a una posible condena que iría desde los 5 años y 1 día hasta los 10 años de cárcel.
¡Terrorista es el Estado! ¡Solidaridad activa con lxs compañerxs encarceladxs!
¡A extender el apoyo y la información, que ningún/a compañerx esté solx en prisión!