Daniel Silva fue un policía chileno de 27 años que, tras ser rechazado hasta 3 veces en el cuerpo de Carabineros, logró ingresar finalmente al mismo al cuarto intento, pasando a formar parte de la vulgar labor represiva al servicio de la propiedad privada y los intereses de lxs poderosxs en la 46ª comisaría de Santiago de Chile.
Sin embargo, no duró mucho su periplo de justiciero cutre, ya que el 1 de agosto de 2013, queriendo hacerse el héroe para ganarse una galletita y unas caricias de sus amos, tuvo un «accidente laboral» e intentó cortarle la huída al expropiador Marcial Berríos, que acababa de asaltar la caja de compensaciones de Macul, recibiendo un tiro en la cabeza.
Mala suerte la de esta familia, ya que, por lo visto, Pablo Silva Pizarro, tío de Daniel Silva, se encontraba entre la escolta de Pinochet cuando el 7 de septiembre de 1996 un grupo de militantes del FPMR (Frente Patriótico Manuel Rodríguez, organización de lucha armada de tendencia Marxista-Leninista) decidió atentar contra la comitiva presidencial para intentar acabar con la vida del dictador. En el enfrentamiento armado que se produjo entre los protectores del genocida Pinochet y quienes le atacaron, el cabo primero de la policía Pablo Silva Pizarro perdió también su despreciable vida. Hace un año, su sobrinito tenía también el «honor» de palmarla en acto de servicio, defendiendo los inmerecidos privilegios de las élites que con su opulencia y egoísmo provocan todas las injusticias de este mundo.
Para recordar al valiente agente como se merece, en la noche del 3 de agosto de 2013, un año y dos días después de su muerte, el «Grupo Antiyuta José Huenante*» destrozó la animita (animita en Chile se refiere a una especie de altar religioso erigido en memoria de alguien) que la policía había levantado en el lugar donde cayó muerto. Lxs compas rompieron adornos del interior y dañaron y realizaron pintadas en la fachada exterior, para luego largarse dejando en el área panfletos que reivindicaban la acción. Días después de tan profano sabotaje, un comunicado fue publicado en algunas webs anarquistas de la red reivindicando la acción, y ahora, tras recibirlo en el correo electrónico de la mano de lxs compas de Noticias de la Guerra Social, lo publico a continuación:
* Nota de este blog: Respecto al nombre del grupo que se adjudicó este ataque, «Grupo Antiyuta José Huenante»: En Chile, la palabra «yuta» se utiliza coloquialmente para referirse de manera despectiva a la policía, siendo equiparable a términos usados aquí en el Estado español como «pasma» o «madera». Así, «antiyuta» viene a significar «antipolicía». Así mismo, José Huenante, que da nombre a esta célula, fue un joven mapuche que en septiembre de 2005 fue detenido en Puerto Monnt y subido a un furgón policial. Desde entonces nadie le ha vuelto a ver, la policía no da datos sobre qué le sucedió, los medios silencian el caso y su cadáver no aparece. Uno de tantos casos de brutal represión contra las personas de etnia mapuche que no ceden a la expropiación y el saqueo de sus tierras por lxs terratenientes y las multinacionales madereras, hidroeléctricas, textiles, transgénicas y demás, y resisten activamente contra ello.
En la imagen final que acompaña a esta noticia, una pintada en inglés que dice «Ninguna lágrima por los polis muertos».
Daniel, pardillo, devuelve el casquillo.
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Por Rodrigo Cisternas
Por Alex Lemún
Por Jhonny Cariqueo
¡Por todxs lxs asesinadxs por la policía bastarda!
El día 30 de Julio a eso de las 23:00 horas, un pequeño grupo de individualidades hace presencia en Avenida Macul con calle Los Cisnes cargados de pintura, propaganda y mucho odio a lxs PERRXS FALDERXS del sistema capitalista, de lxs poderosxs, de lxs millonarixs, con la intención de rayar, profanar y destruir la animita que recuerda al lacayo Daniel Silva quien vio destrozada su vacía cabeza por la precisa bala percutada por el expropiador Marcial Berríos el día 1 de Agosto del año 2013.
Esta acción quiere dejar en claro que no hay miedo ni respeto a lxs policías, ya que ellxs mismxs decidieron ser enemigo del pueblo el día en que se alistaron en aquella institución asesina, represiva y reproductora de cerebros fascistas que no son capaces de discernir si alguna orden es justa o no, simplemente la cumplen, aunque ello implique golpear, torturar o asesinar por el resguardo de la propiedad privada, y por la perpetuidad de esta sociedad enferma que nos roba nuestro tiempo, nuestra libertad y nuestra vida.
Sépanlo bastardxs ¡¡Nuestros golpes serán cada vez más certeros, y no vacilaremos en el momento en que tengamos que cortarles el cuello!! Con esta acción hacemos un llamado a todas las individualidades rebeldes a organizarse y atacar, aunque sea en acciones como ésta que no cambian en nada la miseria del sistema, pero sí demuestran que no todxs somos unxs conformistas embobadxs por los teléfonos de última generación ni con el sueño americano, y aunque sea una acción fugaz, aquel minuto genera un espacio-tiempo de quiebre de la normalidad imperante. Aprovechamos esta instancia para saludar a la compañera Tamara Sol Farías Vergara, fuerza compañera, NO estás sola, tu familia te ama y en los corazones libertarios siempre estás presente como una fuente de motivación para seguir atacando a esta sociedad carcelaria. También queremos saludar a los compañeros Marcelo Villarroel, Freddy Fuentevilla, Juan Aliste y Celestino Córdova, quienes deberán pasar varios años tras las rejas de las podridas cárceles chilenas por luchar por un mundo diferente al existente.
¡¡Presxs a la calle!!
ACAB!!
¡¡La calle es nuestra!!
Grupo Antiyuta José Huenante
