Si nos paramos a analizar el modo en que la prensa burguesa, principal altavoz para la difusión de las versiones policiales, ha analizado el incremento en el número de personas que deciden defenderse de sus provocaciones y además atacar cada vez que el capital y sus intereses amenazan un proyecto o un lugar común (por ejemplo, el Centro Social Okupado Can Vies en Barcelona o el barrio de Gamonal en Burgos), nos encontramos con que su estrategia es la misma en todos los casos.
Cabe recordar que el mismo día en que el alcalde Trías de Barcelona decidió paralizar las obras de demolición de Can Vies, La Sexta emitía un programa donde unos tertulianos (sin la menor idea de qué estaban hablando) decían que a Barcelona habían llegado “miembros del grupo anarquista Black Block”. Cabría preguntarse varias cosas como desde cuándo el Bloque Negro, o Black Block, ha dejado de ser una táctica (empleada incluso por sectores de la extrema derecha en otros países europeos como Alemania o Rusia) para pasar a ser un grupo anarquista. Sin embargo, no es mi intención profundizar en los delirios que motivan las mentiras de la prensa. Por el contrario, prefiero recordar cómo cuando el barrio de Gamonal, en Burgos, decidió apoyar de forma clara y manifiesta a quienes contraatacaban a la policía y rompían vallas y maquinaria de las obras o sucursales bancarias, los medios también hablaron de una influencia externa, aunque en aquella ocasión su fantasma no fue “el grupo anarquista Black Bloc”, sino la intrigante figura de los “violentos itinerantes”, es decir, individuos de otras ciudades llegados a Burgos con el único fin de provocar disturbios, y a lxs que se presentaba como gente totalmente ajena al barrio y sus reivindicaciones, en un burdo y a la vez patético intento de dividir el movimiento.
Por desgracia para estxs terroristas de la pluma (si buscamos terrorista en el diccionario, nos habla de una persona que utiliza el miedo como estrategia o forma de presión para lograr unos objetivos políticos, religiosos etc concretos, es decir, lo que hace el Estado y el Capital para legitimar su orden utilizando a estos “periodistas” para crear miedo y alarma social), su verborrea sensacionalista cada vez tiene menos peso en unos barrios que están cansados de desahucios, de nuevos y más caros impuestos, de que no se les escuche y las calles estén llenas de policía hostigando y jodiendo a migrantes y vecinxs, de una ley cuyos hipócritas representantes aleccionan con su moralidad mientras encarcelan pobres y sueltan narcotraficantes y corruptos, y en fin, la lista podría seguir hasta mañana. Vuestra credibilidad está por los suelos.
Sin embargo, y a pesar de hacer un ridículo cada vez mayor, sus mentiras no cesan ni reducen su calibre, y según una ignonimiosa noticia aparecida en El Confidencial (aquí), los Mossos d’Esquadra asegurarían que “los violentos” de Barcelona estarían “dirigidos” por nada menos que (y cito textualmente) “mercenarios adiestrados expresamente en Italia y EE.UU. en técnicas de guerrilla urbana”. ¡¡Los “radicales del bloque negro ese” en Barna están entrenados por el jodido Rambo!! ¡Sálvese quien pueda, oiga!
Bueno, coñitas aparte que este es un tema serio, según esta noticia, la policía catalana habría detectado a “una masa de 2000 violentos” participando en los disturbios que ocurrieron en Sants en los días siguientes al desalojo de Can Vies, mientras que “otra fuente” (que no especifican, ¡no vaya a ser que los mercenarios yankis les lancen un ataque con misiles!), habría fijado en 700 personas “el número del núcleo duro de los antisistema, muchos de ellos curtidos ya en violentas campañas de Italia y Alemania”. Además, señalan que estos últimos, “decena arriba, decena abajo” (nótese la claridad y la certeza con las que hablan de sus cifras), serían la “vanguardia del movimiento” y llevarían meses “pululando por la capital catalana” para preparar “acciones hostiles”.
También señalan que estxs “violentos” sabrían muy bien cómo actuar en caso de detención, y ponen como ejemplo que piden el habeas corpus en primer lugar, exigen un reconocimiento médico, denuncian torturas y malos tratos y jamás declaran en comisaría. Bueno, una vez más, vemos un ejemplo de cómo intentan buscar morbo en todas partes. Lo de no declarar en comisaría es básico, y no hace falta experiencia para tenerlo presente si te trincan, sólo sentido común. ¿Por qué vas a darles una declaración que luego tengan tiempo de manipular a conveniencia? En cuanto a lo demás, más de lo mismo. No es que “exijan” un reconocimiento médico, es que el propio protocolo de detención hace que los maderos te lo ofrezcan, pero rara vez sirve ya que muchas veces o bien los médicos son polis disfrazadxs (ojo con lo que le cuentas si te han zurrado, que no es tu abogado y no sabes con quién estás hablando en realidad) o bien los maderos se encargan de que los partes de lesiones no reflejen nada que les comprometa. Igualmente, compensa aceptarlo (y si no te lo ofrecen, solicitarlo) si te sientes mal. Además, nos habla de que denuncian torturas y malos tratos, porque el problema no es que existan torturas y malos tratos a personas detenidas en las comisarías del Estado español, sino únicamente que aquellxs que las sufren se atrevan a denunciarlas. ¡Habrase visto semejante osadía!
En fin, otra prueba que ofrecen de la “profesionalidad” de estos “violentos” tan experimentadxs es que actúan encapuchadxs, lo cual requiere de una gran preparación previa, porque es muy difícil taparse la cara para evitar que te cojan.
Además, señalan que “un porcentaje alto de estos violentos son menores de edad”. Yo me pregunto cómo si un porcentaje alto de ellxs son “menores de edad”, pueden haber participado ya en supuestas campañas en Italia y Alemania. ¿Qué pasó, se fueron de vacaciones con sus padres y aprovecharon para quemar contenedores o qué? Los maderos indican que existirían también “campañas de captación” (los movimientos sociales ahora resulta que son sectas), ya que según afirman los menores “son fácilmente manipulables” y “son muy útiles a la hora de asumir responsabilidades penales”. ¿Cómo no se nos había ocurrido antes?, ¡lavémosle el cerebro a niños para que sean ellos los que hagan las acciones y…! Oye, una pregunta ¿vosotros a quién coño le pilláis los alucinógenos, gente?
Siguen su “interesante” análisis exponiendo que “hay una cabeza pensante que organiza todo” y que “los violentos están divididos en guerrillas que se comunican entre sí con walkie-talkies”. Sí, y con Código Morse también, no te jode…
El siguiente párrafo es para enmarcarlo. Copio:
“Esta es una de las características más curiosas que se observa en este fenómeno: una gran parte de los manifestantes violentos son antisistema puros y duros sin más meta que la violencia por la violencia. Pero hay también un importante componente de independentistas, otro de extrema izquierda, otro de extrema derecha, otro de anarquistas italianos y uno, finalmente, de meros delincuentes “que van a ver lo que pillan”.
Según dicen aquí, en medio de las personas que provocaron altercados por el desalojo de Can Vies, habría “antisistemas puros y duros sin más meta que la violencia por la violencia” (¿qué es un/a “antisistema puro y duro”, alguien me lo explica?), independentistas, extrema izquierda y extrema derecha (de repente la ultraderecha supera sus odio histórico a lxs anarquistas, lxs comunistas y lxs independentistas y dejan a un lado diferencias políticas insalvables para aliarse, ¡¡claro que sí!!) y por último habría también anarquistas italianxs (sólo italianxs, de otros países no, porque todxs sabemos que ser anarquista y además italianx te convierte en un ser muy especial con poderes extrasensoriales, y por eso necesitas mención aparte) y “meros delincuentes que van a ver lo que pillan”. También comparan las revueltas en Sants con las vividas en la banlieu francesa en otoño de 2005 (ya nos gustaría a muchxs que las revueltas en Francia por entonces estuviesen tan politizadas y ligadas con el vecindario, y que las revueltas en Barna de estos días tuviesen semejante potencial destructivo).
Los «antisistemas puros y duros», los indepes, los autónomos, los fascistas, los «meros delincuentes», la población migrante… ¡¡todo junto forman los «violentos» de Sants, entrenados por Rambo y por los Power Rangers!! Pero ¿en serio hay gente tan ingenua e imbécil como para creerse vuestras mentiras?
Pero esperen, no se vayan todavía, que no acaba aquí la cosa. Aseguran que el desalojo de Can Vies fue “sólo una excusa” para violentxs presuntamente llegadxs a Barcelona desde las periferias pero sobre todo desde Madrid y Euskal Herria (de esta última, de hecho, afirman que habrían llegado grupos que son “verdaderos expertos en Kale Borroka”. Por supuesto, para el cóctel faltaba la izquierda abertzale.
A la hora de tratar la cuestión de la “financiación de la violencia”, no dudan en referirse a las fiestas y actividades realizadas en diferentes centros sociales okupados de Barcelona, y que intentan presentar como fuente de ingresos para luego “financiar la violencia”, aunque, según dicen, las sospechas policiales están puestas en que, supuestamente, “hay algún partido que apoya la violencia”. Para esta afirmación acusan nada menos que a las CUP, formación de izquierda independentista con actualmente 3 diputados en el parlamento catalán. En concreto hacen referencia a “las bases de la CUP”, que según lxs periodistas y la policía “tienen una fuerte implantación entre lxs okupas”.
Al final, parece que todo lo que no sea el Opus Dei va a ser sospechoso de formar parte de este batiburrillo «violento» en donde, por lo visto, cabe todo, desde lo que llaman «antisistema puro y duro», hasta los comunistas, los anarquistas y los grupos neonazis, sin olvidarnos de los mercenarios estadounidenses, por supuesto.
Ultimando ya, como siempre, el intento de crear divisiones falla, y sólo la ciudadanía más reaccionaria y cateta, o la socialdemocracia más mojigata y borreguil (formada por quienes todavía no se han enfrentado realmente a las consecuencia de vuestras políticas asesinas) son capaces de creerse una palabra de esas novelas de ciencia-ficción que os atrevéis a llamar “noticias”, y la cifra de crédulos se reduce cada día que pasa. La paz social se está viniendo abajo, junto a las garantías que aun nos prometían un futuro mejor, que ahora está claro que no llegará.
Vosotrxs seguid mintiendo, asquerosxs, que si ladran, ¡cabalgamos!